Los Lakers consiguieron una gran victoria ante los Pelicans
Con héroes inesperados
La NBA no es la mejor liga deportiva del mundo por casualidad. Además de ser la única -en un deporte masivo a nivel mundial- que reúne verdaderamente a los mejores jugadores del planeta, tiene siempre en el cajón alguna sorpresa individual que sacude a la competencia. Sí, es la liga de las estrellas, pero también hay lugar para los actores secundarios.
Y que lo digan los Lakers si no, que contaron este miércoles con dos héroes inesperados en la victoria ante New Orleans por 120-117 en tiempo suplementario en el estadio Crypto.com Arena de Los Ángeles. Se trata de Lonnie Walker y Matt Ryan, uno recién llegado desde San Antonio para apuntalar el plantel y el otro un joven que, hasta esta temporada, apenas había jugado un partido en la NBA.
Lo de Walker fue sensacional durante todo el juego. El base, que se afianza como titular en los dirigidos por Darvin Ham, fue el goleador del partido con 28 puntos y además estuvo muy certero en el tiro de tres (5 de 9), un apartado donde los Lakers vienen sufriendo desde el comienzo de la temporada: marchan últimos en la liga con un 26,7% de efectividad desde la larga distancia.
Otro de buen partido, en especial en la primera mitad, fue Russell Westbrook, quien se está adaptando bastante bien a su nuevo rol saliendo desde la banca. El MVP de la liga en 2017 contribuyó con 13 puntos, 9 asistencias y 7 rebotes, y fue clave en el segundo cuarto para revertir un partido que había empezado mal para los angelinos. En la visita, la figura de Zion Williamson se hacía fuerte en la pintura (terminó con 27 puntos y 5 rebotes).
Mientras tanto, LeBron James y Anthony Davis, los jugadores franquicia de los californianos, tuvieron un partido modesto para lo que se espera de ellos aunque no se puede decir que no lo hicieron bien. The King finalizó con 20 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias aunque su estadística se vio opacada por el 0-7 en triples. Davis, en tanto, aportó 20 unidades y 16 tableros, siendo clave en esa faceta. De todas maneras, ambos fueron importantes en el tiempo extra para conseguir la victoria.
Pero claro, ninguna prórroga hubiese sido posible sin el otro héroe de la jornada: a falta de 1.3 segundos en el tiempo regular, los Lakers reponían desde el costado ofensivo con los Pelicans arriba por tres puntos. Solo un triple podía extender el juego. Sacó Austin Reaves desde la banda, el pase largo fue hacia la esquina contraria cruzando todo el ancho de la cancha para un Matt Ryan que la tomó, se elevó desde el rincón al borde de la línea final y lanzó.